Repudio total a las manchas de la iglesia

Un oscuro delito en la intimidad del hogar

Viernes, 26 de noviembre de 2010

Fuente: El Observador

Vestidas de negro, 300 mujeres homenajearon a las 351 asesinadas desde 2001 Las escalinatas del Palacio Legislativo fueron el escenario en la tarde de ayer de una performance en conmemoración del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Más de 300 mujeres de todas las edades, vestidas completamente de negro, simbolizaron a las 351 mujeres que murieron desde 2001 hasta 2010 en Uruguay por casos de violencia dentro del hogar. De esta forma, los organizadores del acto (que luego tuvo un espectáculo musical en la misma explanada frente a la avenida Del Libertador) hicieron público un fenómeno que es primordialmente privado y que se da en el seno de los hogares y entre familiares. La performance comenzó con los acordes iniciales de La cabalga de las Valkirias, de Richard Wagner. Las mujeres de negro, ubicadas en las escalinatas, descendieron en grupos de unas treinta integrantes organizadas por cada uno de los años que se recordaban, y quedaron petrificadas, representando algunos de los sentidos con que se reacciona frente a la violencia doméstica: manos en la boca expresando silencio; manos en los oídos, expresando no querer escuchar; manos en los ojos, expresando no querer ver. Otras hicieron el signo de alto con la mano al frente, otras se abrieron de piernas expresando partos, otras acunaron un hijo. La performance tuvo la musicalización de la DJ Paola Dalto. Luego de que se organizaron en las escaleras, se vistieron con unas remeras y unos pañuelos manchados de tinta roja. Luego de un silencio la voz de una mujer en el micrófono leyó los 351 nombres de las mujeres que han muerto desde 2001 hasta 2010. "La idea original era que se leyeran los 350 nombres de las mujeres asesinadas víctimas de violencia, pero ayer murió otra más", dijo a El Observador unas de las organizadoras. Ante cada nombre, las mujeres en las escalinata repetían el nombre con un grito. En algunos casos, el nombre de la mujer muerta no estaba identificado, por lo que se dijo el consabido "NN", seguido del departamento de origen de la víctima. Durante varios pasajes de la larga lista de nombres, muchas de las mujeres se emocionaron hasta las lágrimas. Luego las mujeres se quitaron las prendas manchadas y se dieron un abrazo de reconciliación y apoyo. A modo de cierre, dos niños vestidos totalmente de blanco leyeron una breve proclama donde se reivindicaba el derecho de que las niñas pueden jugar al fútbol o al rugby sin ser consideradas "machonas", ni que sus órganos sexuales se utilicen en el lenguaje como insulto, mientras se decía que los varones tienen derecho a jugar con muñecas y a cocinar sin ser considerados "mariquitas". Según la proclama, el papel de "macho" que las normas sociales le hacen jugar a los varones influye directamente en la conducta violenta de muchos hombres adultos. Como propuestas, las organizaciones que luchan contra el fenómeno proponen a nivel institucional la creación de un sistema nacional de registro y seguimiento de las situaciones de violencia hacia las mujeres. También se reclama verificar la idoneidad del personal asignado para la atención hacia mujeres y niños, y promover su capacitación. Según una manifestante presente ayer en la escalinata del Palacio Legislativo, esta situación sucede, por ejemplo, en varias de las comisarías de la mujer y la familia.